Fernando Savater “contra el separatismo”

(Texto publicado inicialmente el 27-Noviembre-2017.)

Fernando Savater “contra el separatismo”

Fernando Savater fue entrevistado anoche en una de las televisiones españolas, obsesivamente especializada en el problema de “la unidad de la patria”. El titular de la entrevista: “El filósofo vasco presenta su nuevo libro titulado ‘Contra el separatismo’.”

Al parecer, tras ver el reciente éxito editorial del escritor español Fernando Aramburu con su libro “Patria”, había que seguir explotando el filón del Nacionalismo español, que tan jugosos y seguros rendimientos parece dar a sus servidores. El título de la obra, y según parece su contenido, están al nivel de esa demanda, absolutamente condicionados por las urgencias del momento.

Tal vez ignorante de esta necesidad con la que ha sido escrito el libro, el periodista-provocador le pregunta “ingenuamente”: “¿No habría sido mejor esperar a que se calmaran los ánimos, antes de sacar el libro?” Entonces la contestación del autor no puede ser más sincera y reveladora: “Es que yo lo que quiero es movilizar a la gente. O sea, aquí [en su libro] hay un conjunto de ideas y un conjunto de – digamos – estímulos para que la gente intervenga”. “O sea”, que su indisimulado objetivo como instigación y potenciación del odio contra el deseo de independencia de los Pueblos sojuzgados es patente.

Según él, “la policía no utiliza la violencia, utiliza la fuerza, por eso se llama fuerza pública”. Sin duda es necesario ser “filósofo” para llegar a tan profundas conclusiones. Según esa línea de “razonamiento”, no existen partidos ni Estados fascistas e imperialistas, puesto que nadie se llama a sí mismo de ese modo. Todo el mundo es “demócrata”, o al menos nadie es “anti-demócrata”; los llamados partidos “socialistas” lo son realmente por el simple hecho de que se llaman así, y las asociaciones de malhechores sin duda se llaman también así ellas mismas, puesto que según “el filósofo vasco” los nombres se corresponden siempre y necesariamente con la naturaleza de las cosas, y no existe el engaño ni el camuflaje.

Según se ve, las supercherías a caño libre son el nivel estos “filósofos” al servicio del poder establecido.