Ocultación del imperialismo franco-español en el “Manifiesto por el himno de Euskal Herria / Vasconia”

(Texto publicado inicialmente el 12-Agosto-2020.)

 

Ocultación del imperialismo franco-español en el “Manifiesto por el himno de Euskal Herria / Vasconia


 

Tras leer la versión en Español del “Manifiesto por el himno de Euskal Herria / Vasconia”, nos vemos obligados a hacer las siguientes constataciones:

1.- En todo ese “Manifiesto”, la expresión ‘Pueblo Vasco’ NO APARECE NI UNA SOLA VEZ. Dice textualmente que “Todo pueblo tiene una lengua” etc.; pero asombrosamente este pueblo: que es el nuestro, cuya única lengua propia es el Euskara, Y QUE ES EL PUEBLO VASCO DESDE QUE HAY REGISTROS HISTÓRICOS, según ese “Manifiesto” no tiene un nombre. Puesto que evidentemente sí lo tiene, está claro que ese “Manifiesto” lo oculta deliberadamente.

2.- En todo ese “Manifiesto”, el nombre de nuestro Estado: el Reino de Nabarra (cuyo himno nacional y oficial es el Himno de los Estados – o Cortes – de Nabarra), NO APARECE NI UNA SOLA VEZ. Tampoco se afirma que el Pueblo Vasco, que por otra parte ya vemos que es ignorado, tenga un Estado.

3.- En todo ese “Manifiesto”, la palabra ‘imperialismo’, o ‘colonialismo’ y sus concordantes, NO APARECEN NI UNA SOLA VEZ.

4.- En todo ese “Manifiesto”, el sojuzgamiento de nuestro Pueblo bajo la dominación imperialista franco-española NO APARECE NI UNA SOLA VEZ.

5.- En todo ese “Manifiesto”, el criminal Nacionalismo Imperialista español y francés contra el Pueblo Vasco NO APARECE NI UNA SOLA VEZ. Si en él se menciona la palabra ‘nacionalismo’, es únicamente para designar con ella a los “nacionalistas vascos”; en cambio, según ese “Manifiesto”, los Españoles son “socialistas”, “comunistas”... todo menos los Nacionalistas-imperialistas que virtualmente todos ellos son (salvo las excepciones individuales que confirman la regla).

6.- En ese “Manifiesto”, el término ‘Euskal Herria’ es vaciado de su significado real, que en Euskara significa estrictamente Pueblo Vasco o Nación Vasca; y, en la mejor tradición carlista-española (por cierto, propia del autor de la canción ‘Gernikako Arbola’ y posiblemente también del autor de ese “Manifiesto”), es recuperado para que signifique una “Vasconia” franco-española que en realidad consiste SOLAMENTE en sus montes, ríos, valles, prados, fuentes, caseríos, tierra... PERO NO EN EL PUEBLO VASCO: propietario y habitante de ese País desde tiempos prehistóricos (cuando no existían Francia ni España); del mismo modo que Helvetia era el País de los Helvetios, o Germania el País de los Germanos, y – al igual que esos Países – sujeto agente del derecho internacional de independencia, libre disposición o autodeterminación de todos los Pueblos.

“Ara, nun diran mendi maiteak, / ara, nun diran zelaiak, /

baserri eder zuri-zuriak, / iturri eta ibaiak. /

Endaian nago txoraturikan, / zabal-zabalik begiak:

Ara, España, lur oberikan / ez da Europa guztian!

O! Euskal Herri, eder maitea: / ara, emen zure semea;

Bere lurrari muin-ematera “ etc. etc.

7.- En todo ese “Manifiesto”, la expresión ‘himno nacional’ NO APARECE NI UNA SOLA VEZ. Ello no es sorprendente sino plenamente coherente con un “Manifiesto” en el que no hay Pueblo Vasco, ni por lo tanto derecho de autodeterminación de todos los Pueblos y por tanto del Pueblo Vasco, ni Nación Vasca, ni Estado Vasco, ni por lo tanto Himno Nacional Vasco.

En la mejor tradición imperialista y colonialista de la “autonomía cultural extra-territorial”: que es donde bebe ese “Manifiesto”, únicamente debería haber “En definitiva, un himno vasco e internacional, símbolo mundial, documentado en todos los territorios”, según dice ese documento; una expresión con la que evitan referirse a todos los Territorios de la Nación Vasca y de su Estado. Ahora bien, como es evidente, lo “inter-nacional” no niega SINO QUE IMPLICA relaciones entre Naciones (‘inter-Nationes’) en pie de igualdad; pero eso es negado para la Nación Vasca en un “Manifiesto” que ignora/niega la Nación Vasca.

La repugnante mala fe de los charlatanes redactores de ese “Manifiesto” es evidente, puesto que tratan de colar un “himno internacional” que no sea nacional, es decir: un himno “inter-nacional” que ante todo niegue la Nación Vasca, si bien no las demás. El criminal régimen Nacionalista, Imperialista y Fascista franco-español: de ocupación militar sobre el Pueblo Vasco y su Estado el Reino de Nabarra, no tiene motivos para estar preocupado por ese “Manifiesto”. Indudablemente sus autores: agentes del imperialismo infiltrados entre nuestro Pueblo, se han “llevado al huerto” a muchos incautos.

Según parece, los redactores y firmantes de este “Manifiesto” (unos conscientes de lo que hacen y movidos por la mala fe, y otros absolutamente engañados sobre lo que significa semejante texto) no están preocupados por el imperialismo franco-español que sojuzga al Pueblo Vasco y su Estado. Lo único que les preocupa es que un “determinado” grupo de personas: los “vasconavarros”, que forman un “pueblo” indeterminado y no nombrado al que llama “el nuestro, que [está] repartido en tres unidades político administrativas” (las cuales no dice que son españolas y francesa aunque sí las menciona exactamente por sus nombres oficiales en Español y Francés), lo que les preocupa, decimos, es que ese grupo de personas no tenga “un himno vasco e internacional”. Pase que el Pueblo Vasco esté sojuzgado bajo el imperialismo de España y de Francia: una situación cuya ocultación sistemática y absoluta es la finalidad que tiene el “Manifiesto”; pero que no tenga un “himno internacional”... ¡hasta ahí podíamos llegar!

El denominado “Manifiesto por el himno de Euskal Herria / Vasconia” constituye una maniobra de negación tanto del Pueblo Vasco como un Pueblo más del Mundo con su derecho de autodeterminación o independencia, así como de su Estado reconocido durante mil años, el Reino de Nabarra; y de encubrimiento del imperialismo colonialista franco-español sobre ellos.

Se trata de una maniobra instrumentada por agentes provocadores indígenas al servicio del régimen imperialista y fascista franco-español de ocupación militar sobre nuestro País (algo que ellos no sólo niegan que lo sea sino que desde hace casi medio siglo están admitiéndolo como legítimo, democrático y “el Estado” propio), y secundada por elementos señaladamente incapaces de toda formulación político-estratégica anti-imperialista, así como de toda reflexión sobre estos hechos cuando les son expuestos, si es que ante ello – y lejos de reconocer la auténtica realidad – no reaccionan con hostilidad y flagrante mala fe contra quienes se lo ponen de manifiesto.

Se trata de una maniobra destinada a la distracción, el embrutecimiento y la recuperación política del Pueblo Vasco, al objeto de que continúe bajo la dominación de España y de Francia donde su liquidación está asegurada; algo que denunciaremos siempre.

*

En cuanto al proyecto de “declarar” la canción “Gernika-ko Arbola” como “himno” de unos travestis que en ese “Manifiesto” son presentados como “vasconavarros”, pero que para el autor del proyecto son españoles y franceses (por no mencionar a los diversos americanos y a todo el mundo de la diáspora), todo ello parte del artículo ‘Aberri Eguna con virus’ que José Mari Esparza Zabalegi publicó en el Diario ‘Noticias de Navarra’ el 15-Abril-2020. En él, el autor entraba en materia afirmando textualmente: “Yo soy de los que siguen emocionándose cuando en la película ‘Casablanca’ cantan ‘La Marsellesa’”. Es decir: él es de los que se emocionan al oír que los criminales imperial-colonialistas franceses – ¡y aliados de los Nazis para más señas! – cantan su sanguinario himno Nacionalista-imperialista en una colonia francesa: tenida y mantenida por ocupación militar como podrían haberlo cantado en Baiona, y que incita a los Franceses a seguir regando los surcos de la tierra con la sangre impura de los demás: ‘Marchons, marchons, qu’un sang impur abreuve nos sillons’. A partir de esa presentación, podemos intuir la solvencia moral, intelectual e ideológica que nos ofrecen sus ocurrencias como la que ahora propone.

Sin embargo, un himno – sea cual sea el elegido – en principio NO ES NI PROPORCIONA UN MANIFIESTO NI UN PROGRAMA POLÍTICO para hacer frente al imperialismo. De hecho, los autores de ese “Manifiesto” no sólo ocultan el imperialismo franco-español sobre el Pueblo Vasco sino que proponen un himno cuyas “ventajas” consisten, según ellos, en que no molesta y es plenamente compatible con la continuidad del imperialismo; y con el que pueden identificarse también los imperialistas. Como en el artículo de Esparza se reconoce: “Curiosamente, hoy día son los carlistas, los del PP y los del PSOE quienes lo siguen cantando y vindicando. [...] Los navarristas (Aizpun, Del Burgo, Alli, ‘Diario de Navarra’) siempre lo asumieron”. Por cierto: falsos navarristas” habría que decir, ¿no?

Pero, como es sabido, la recuperación de los símbolos de los vencidos, y su exhibición como trofeos, es un lugar común de todo imperialismo, y ciertamente no es algo de lo que haya que alegrarse ni significa nada bueno para nosotros. Alegrarse-asombrarse de que Vascos Renegados, Colonos españoles y Fascistas, como los que el autor indica, “lo sigan cantando y vindicando”, da idea de la aberración intelectual y moral que se le ha colado al País, consistente en “un himno vasco e internacional” que valga para los colonialistas y para los colonizados; para los imperialistas y fascistas, y a la vez para los Resistentes contra ellos.

Todo ello, con la colaboración de saboteadores y agentes provocadores indígenas al servicio del imperialismo, y con la inconsciente ayuda de los eternos despistados e incompetentes de este País; quienes, a pesar de todas las advertencias, siguen permanentemente dispuestos desde 1977-79 a meterse de forma entusiasta en todas las trampas y a dejarse cazar en todos los lazos que el imperialismo español les tiende, con la única condición de que esas trampas y esos lazos estén burdamente y aunque sólo sea un poco disfrazados de “vasquismo”. Y quienes, cuando son colocados frente a esta realidad, lejos de reconocer su desastrosa actuación, reaccionan con resentimiento y mala fe contra quienes les advirtieron del error que iban a cometer y que siguen cometiendo.

Para un País independiente, el Himno Nacional es un símbolo que une a todo el País y en el que todos sus ciudadanos se identifican. Pero en un País negado en su existencia misma como lo es el nuestro, y bajo una situación de ocupación militar, no sólo sus símbolos – como himnos etc. – sino incluso sus caracteres nacionales más innegables: por ejemplo un idioma propio y tan ajeno al Español/Francés como lo es el Euskara, son RECUPERADOS Y APROPIADOS por el imperialismo como elementos propios y trofeos de caza. Es así como se nos dice, por ejemplo, que el Euskara “es un idioma español” y el resto de trampas derivadas de ello. Por lo tanto, y en definitiva, sólo una RESISTENCIA NACIONAL férreamente unida en torno a una posición ideológica-estratégica propia e irrecuperable por el imperialismo, Y NO UN HIMNO, puede darle a ese País militarmente ocupado la posibilidad de hacer frente a su integración/asimilación, y finalmente a su destrucción total e inexorable a manos del imperialismo ocupante.

En cualquier caso, y como se indica en la ‘Declaración sobre el Idioma, los Territorios, el Estado y los Símbolos del Pueblo Vasco/Euskal Herria’, publicada en esta página el 27-Diciembre-2019, el 12-Abril-2020 y el 30-Junio-2020:

“En cuanto a la elección de otros símbolos, tales como himnos nacionales u otros, y como ya ha quedado apuntado, sólo el restablecimiento de las condiciones de la Autodeterminación: con la previa expulsión de todos los ejércitos extranjeros que ocupan nuestro País, nos permitirá hacer esa elección con plenas garantías de participación, información y aportación generales; en particular, de quienes estén cualificados para aconsejar sobre la decisión más correcta en tales cuestiones. Hasta ese momento, todos los elementos que pertenecen al acervo cultural de nuestro Pueblo deberán ser celosamente preservados.”

Para la Salvación del País, el único Manifiesto en torno al cual podemos aglutinarnos todos los Vascos demócratas, el único Programa Político que puede conseguir la unidad estratégica de todos los sectores democráticos y populares del Pueblo Vasco frente al imperialismo colonialista franco-español, es la afirmación de dos Principios fundamentales que, incorporando en nuestro favor todo el potencial del derecho internacional, son inmediatamente asumibles “de forma natural” por todos esos Vascos demócratas; mientras que su rechazo sólo puede ser mantenido por los Renegados, los Imperialistas y los Fascistas. (Véase nuestro texto: Manifiesto del Movimiento Vasco de Resistencia y Salvación Nacional’, publicado en Español, EuskaraFrancés e Inglés.)

Estos dos Principios son y sólo pueden ser:

1/ Afirmación del derecho de libertad, LIBRE disposición, independencia nacional o autodeterminación del Pueblo Vasco/Euskal Herria.

“Piedra angular de la democracia”, el derecho internacional de autodeterminación o independencia de todos los Pueblos es un derecho que es originario, fundamental, inherente, de costumbre, inmediato, incondicional, continuo, permanente, inalienable, irrenunciable e imprescriptible para todos los Pueblos sojuzgados bajo un régimen imperialista y extranjero; que es la misma cosa que la incondicional e inmediata independencia de éstos contra/frente a toda dominación o intromisión extranjera contraria a su libertad nacional; y que ha sido reconocido – no constituido – por el Derecho Internacional contemporáneo de las Naciones Unidas: desde el Artículo Primero de su fundacional Carta de San Francisco así como por numerosas y relevantes Resoluciones de su Asamblea General, como EL PRIMERO DE LOS DERECHOS HUMANOS FUNDAMENTALES Y LA CONDICIÓN PREVIA PARA EL PLENO DISFRUTE DE TODOS ELLOS.

Su corolario y aplicación práctica consiste, como requisito ineludible para su realización, en la EXIGENCIA DE EVACUACIÓN INCONDICIONAL E INMEDIATA de todas las fuerzas de ocupación y de todo el aparato de sojuzgamiento imperial-colonialista de las Potencias ocupantes: España y Francia, FUERA de los Territorios históricos del Pueblo Vasco y de su Estado. Y

 

2/ Afirmación de la continuidad, vigencia y actualidad de nuestro Estado propio: el Reino de Nabarra, sucesor del Reino de Pamplona – “el Reino de los Vascos” – constituido por una Confederación de Repúblicas, Condados y Señoríos Vascónicos histórica y libremente reunida en torno a él. Internacionalmente reconocido durante mil años, el Reino de Nabarra sigue siendo el único Estado de la Nación Vasca, al que jamás ha renunciado ni ha admitido ni reconocido nunca ningún otro.

Su necesaria consecuencia implica EL NO-RECONOCIMIENTO Y LA DENUNCIA constantes e incesantes de los Estados ocupantes: el “Reino de España” y la “República francesa”, y de sus regímenes totalitarios de ocupación militar, como criminales, imperialistas, colonialistas y fascistas, y no como los propios, no-Nacionalistas, no-violentos, legítimos y democráticos, según está haciendo hasta el día de hoy la pretendida “clase política oficial vasca” formada por la burocracia liquidacionista Pnv-Eta y sus satélites.

Pero claro, los falsos “activistas” de este País no quieren entender nada de esto. Prefieren hacer lo que hacen: política imperialista y seguir apoyando a la burocracia mafiosa-liquidacionista Pnv-Eta que reconoce el criminal régimen fascista franco-español de ocupación militar como no-Nacionalista, no-violento, legítimo y democrático, mientras lo camuflan con “propuestas” como la del himno. Pero esto no debería sorprender ni demoralizar a un auténtico patriota y resistente, y desde aquí animamos a que tal cosa no suceda.

Simultáneamente, es preciso mantener un BOYCOTT TOTAL a toda colaboración con quienes, por rechazar en la teoría o en la práctica uno o ambos principios fundamentales arriba mencionados, forman objetivamente parte del imperialismo. Como es incuestionable, quienes entre nosotros – sean cuales sean su origen y apellidos – rechazan asumir total o parcialmente esos principios, quedan absolutamente desenmascarados como los imperialistas y fascistas que son: partidarios de que continúe la ocupación militar imperialista de nuestro País y de nuestro Estado por los Estados de España y de Francia. Ahora bien, ¿qué colaboración puede haber con estos agentes? ¿Puede alguien honesta y cuerdamente creer que es posible hacer una política anti-imperialista con el concurso de imperialistas y fascistas? Está claro que no.

Así pues, mientras el imperialismo no retira sus fuerzas de ocupación (dado que ellas CONSTITUYEN el elemento esencial y fundamental de su dispositivo estratégico de dominación, sin el cual todo su sistema se desploma), y puesto que no es posible hacer una política anti-imperialista junto con los quinta-columnistas y agentes al servicio del imperialismo infiltrados entre el Pueblo sojuzgado, es preciso mantener un BOYCOTT TOTAL:– a toda colaboración con quienes, por rechazar en la teoría o en la práctica uno o ambos principios fundamentales citados, forman objetivamente – algunos incluso de forma subjetiva y confesa – parte del imperialismo; y

– a toda participación, tanto en las instituciones del régimen imperialista-colonialista franco-español y especialmente en sus monopolios jurídicos o “parlamentos”: Parlamento francés y Cortes Generales españolas, establecidos a lo largo de los siglos mediante el Monopolio de la Violencia y el Terror de guerra y de Estado, e imprescriptibles crímenes constitutivos; así como en sus “elecciones generales” totalitarias que “legitiman” todo ello.


DERECHO DE AUTODETERMINACION O INDEPENDENCIA NACIONAL INCONDICIONAL E INMEDIATA DEL PUEBLO VASCO / EUSKAL HERRIA!


¡REINO DE NABARRA: EL ESTADO DEL PUEBLO VASCO / EUSKAL HERRIA!


¡Ejército de ocupación ni con música!

¡España ni con república! ¡Francia ni con monarquía!


¡BOYCOTT TOTAL A LOS IMPERIALISTAS Y FASCISTAS, Y A SU RÉGIMEN DE OCUPACIÓN MILITAR!  –  ALDE HEMENDIK!


¡¡¡VIVA EL PUEBLO VASCO LIBRE!!! – GORA EUSKAL HERRI ASKEA!!!

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