Las burocracias colaboracionistas se preparan para las “elecciones al parlamento europeo”

(Texto publicado inicialmente el 5-Febrero-2019.)

Las burocracias colaboracionistas se preparan para las “elecciones al parlamento europeo”

Las maquinarias de las organizaciones que integran el conglomerado burocrático Pnv-Eta: agentes para la liquidación estratégica de la Resistencia democrática del Pueblo Vasco contra el régimen totalitario, imperialista y fascista franco-español de ocupación militar bajo el que está sometido (un régimen en el que esas burocracias se integraron desde 1977-79 y que siguen reconociendo desde entonces hasta el día de hoy como “legítimo, no-violento y democrático”), se han puesto de nuevo en marcha en una nueva campaña para conseguir que este Pueblo acuda a votar en las que llaman “elecciones europeas” o “al parlamento europeo”.

Ahora bien – y como es innegable – las “Constituciones” formales de los Estados español y francés (los cuales son en todos los sentidos “constituyentes de la Constitución Europea”) establecen los pueblos-nación español y francés como única fuente de derecho en sus respectivos ámbitos de dominación y “terrenos de caza”, con exclusión de los Pueblos dominados por ellos, los cuales no existen y no tienen, por lo tanto, ni derecho de autodeterminación ni derecho de nada ya que lo que no existe no tiene derechos. Así pues el llamamiento de esta burocracia de traidores – con Ortuzar y Otegi a la cabeza – para que el Pueblo Vasco acuda a la participación electoral en las “elecciones europeas” se basa en la ocultación al Pueblo de ese hecho fundamental, e implica estrictamente la negación del Pueblo Vasco y su transformismo, al quedar internacionalmente presentado como travestis españoles o franceses.

Como ha quedado gráficamente visible en la presentación de esta nueva campaña, que fue “respaldada” con la presencia de sus centenares de candidatos, estas maquinarias electorales constituyen enormes engranajes cuya misión consiste en distribuir la corrupción y los enchufes: en este caso los sueldos de los “electos” que están “en juego”, haciendo así posible el funcionamiento y la continuidad del régimen imperialista y fascista establecido. Efectivamente, esta burocracia liquidacionista Pnv-Eta, sus agentes y beneficiarios, han aceptado hace tiempo el régimen imperialista como la única e inamovible realidad política: son factores de su estabilidad y permanencia, se mueven en ella como pez en el agua, y no tienen ni idea ni tampoco la menor intención de hacer nada por cambiarla. Componen una capa social dispuesta a todo para conservar los privilegios que deben al fascismo en el poder, y durante los últimos cuarenta años han creado una nube de clientelismo que depende absolutamente de ellos. El Pueblo Vasco y sus derechos no son para ellos sino el filón a explotar y exprimir por cuenta propia hasta su agotamiento total. De hecho, en ningún momento hacen la más mínima afirmación de su derecho de autodeterminación o independencia, absolutamente incompatible con la criminal dominación imperialista franco-española (establecida mediante la secular agresión militar contra sus derechos fundamentales), que ellos han aceptado y a la que llaman “democracia no-violenta”.

Para enmascarar la píldora y hacer más fácil que el Pueblo se la trague, algunos de esos “estrategas”: auténticos muñecos de trapo todos ellos en las manos del imperialismo, han establecido “alianzas” con quienes, tras haber declarado supuestamente una “república independiente” (lo cual lo encuentran compatible con el hecho de seguir en el Parlamento de la metrópoli), fueron sin embargo a votar dos meses después en unas “elecciones autonómicas” españolas convocadas directamente por la metrópolis de la que supuestamente ellos se habían independizado. “Orain Errepublikak”, dicen; cuando ocurre que ésos que más presionaban para que se declarase “la república”: amenazando con clamar “¡traición!” si no se hacía así (nombradamente: Junqueras-Erc), fueron además quienes – tras haber quedado todo “ilegalizado” y haber sido esas “elecciones regionales españolas” convocadas de ese modo esa misma tarde del 27-Octubre-2017 – más corrieron al día siguiente a apuntarse en el Ministerio del Interior español para presentarse los primeros en dichas “elecciones”.

De forma similar, la burocracia liquidacionista Pnv-Eta pretende que se presentan ahora “por el reconocimiento de nuestros pueblos en el Estado español y Europa”, cuando el hecho mismo de presentarse a esas “elecciones” implica tácita y expresamente que han aceptado: 1/ la inexistencia de la Nación vasca como Pueblo con derecho de autodeterminación; 2/ la aceptación de los Estados totalitarios e imperialistas español y francés como Estados propios y democráticos, y por tanto la inexistencia de nuestro único Estado propio: el Reino de Nabarra; 3/ y en definitiva que han tragado ante toda Europa la afirmación imperial-colonialista de que los “vascos” no existen excepto como “españoles” o “franceses”. Después de cuarenta años “cuesta abajo en mi rodada”, el embrutecimiento intelectual, la putrefacción ideológica, la incapacidad estratégica y la ruina política, la miseria moral y la traición a los principios nacionales y democráticos, y la deslealtad y el juego sucio: características de estas burocracias juguetes del régimen, parecen haber alcanzado un grado que difícilmente podrá ser superado.

“La abstención: recurso natural e inmediato de los Pueblos oprimidos frente al condicionamiento totalitario, es elemento constitutivo de una política de oposición democrática consecuente. Factor dinámico de primera dimensión, plantea de un golpe las verdaderas cuestiones de estructura política, desbarata el complejo establecido de recuperación y colaboración, pone en entredicho los monopolios de presión, represión e información, y destruye la parodia de sumisión y democracia con que la propaganda imperialista pretende ocultar la realidad. [...] El fascismo valora y recompensa el ejercicio del sufragio “universal” cuando los votantes, las reglas, las condiciones y las opciones las pone él. Los poderes totales reducen y digieren todo lo que no se encuadra en una oposición política consecuente. Sólo ven, temen y proclaman como mal supremo e irrecuperable la abstención y el boycott: expresiones e instrumentos de una inequívoca oposición estratégica al sistema.” (Véase ‘Otra vez “elecciones generales” (IPARLA núm 1)’, Junio-1977; y ‘La “Constitución” europea (IPARLA núm 4)’, Febrero 2005, en PUBLICACIONES IPARLA.)