Cometido del Nacional-socialismo español de Falange-PsoE en la transición intra-totalitaria española al Segundo Franquismo

(Texto publicado inicialmente el 7-Diciembre-2018.)

Cometido del Nacional-socialismo español de Falange-PsoE en la transición intra-totalitaria española al Segundo Franquismo

La colonización del PsoE por el sindicalismo falangista cristalizó en la expulsión de la vetusta burocracia de ese partido en el exilio, y su substitución por un equipo de jóvenes neo-falangistas sevillanos. Esto ocurría en 1974 en el Congreso llamado de Suresnes (Francia), momento en que el viejo partido social-imperialista español pasaba a ser Nacional-socialista: el actual Falange-Ugt-PsoE, gracias al apoyo financiero y político de los servicios secretos occidentales y de la “internacional socialista” europea.

Tras haber conseguido que la burocracia liquidacionista Pnv-Anv del exilio abandonara los principios fundamentales y toda la política nacional para la liberación del Pueblo Vasco, liquidando para ello el Gobierno Vasco en el exilio (abandono y liquidación realizados ilegal y clandestinamente por esas burocracias en el Pacto de Múnich de 1962 con el PsoE, como condición para su integración junto con la “oposición” Nacional-imperialista española en el “nuevo régimen democrático” unitario que substituiría – de forma perfectamente ordenada y “desde la ley [franquista] a la ley [neo-franquista]” – al del General Franco tras su muerte), esa sustitución de la burocracia del PsoE en el exilio, realizada en Suresnes en 1974, era la operación final que faltaba para poder abordar con total seguridad la Transición intra-totalitaria, que se preveía ya próxima, entre el Primer y el Segundo Franquismo actualmente reinante.

A la muerte – en su cama – del dictador, esta “transición” (1976-79) consistió en el mantenimiento íntegro de todos los logros conseguidos por el General Franco y el Nazi-Fascismo español, clerical e internacional mediante su guerra de exterminio y genocidio de 1936-39; y en particular, el de su Estado imperialista y totalitario establecido sobre los Pueblos Vasco y Catalán y sus Estados anexados mediante agresión y Violencia criminal. Ello estaba garantizado por la continuidad intacta – que llega a la actualidad – del Ejército: única clase política real española desde 1812, y de la Guardia Civil, la Judicatura, la Policía, la Administración etc.; “milagrosamente” transformados todos ellos en “demócratas de toda la vida” de la noche a la mañana.

Así pues – Y ÉSTA FUE LA GRAN NOVEDAD – desde aquel momento el intacto régimen fascista español se admitiría como “democrático y no-violento” gracias a la complicidad de esa falsa “oposición” de Nacional-socialistas y Nacional-comunistas españoles: reconvertidos todos en legitimistas monárquicos y admitidos dentro de la gestión y los enchufes del sistema que todos ellos había reconocido como "legítimo y democrático". Pero, sobre todo, ello se lograba gracias a la traición de las burocracias “vascas y catalanas”: totalmente colonizadas y recuperadas ideológicamente por la “oposición” Nacional-socialista española durante el exilio, e integradas en el régimen imperialista y fascista del Segundo Franquismo, que ellas admitieron y siguen admitiendo desde entonces y hasta el día de hoy como “no-Nacionalista, no-viento, legítimo y democrático”, y además como el régimen y “el Estado” propios. Su traición no puede ser más completa.

Estamos por tanto ante un régimen imperialista que niega expresa y “constitucionalmente” los Pueblos Vasco y Catalán, sus Estados sojuzgados, y su derecho fundamental e inherente de autodeterminación o independencia en pie de igualdad con todos los Pueblos libres del Mundo, mientras los afirman por el contrario como “parte del pueblo y el Estado de España y de Francia”: que según afirman son los únicos que hay, y que están siendo mantenidos gracias a una repugnante traición que esas burocracias ocultan a su Pueblo. Un rol que éstas aceptaron a cambio de poder distribuir desde entonces en sus respectivos “territorios” la corrupción, los enchufes y la gestión delegada de una “descentralización” administrativa totalmente dependiente del régimen fascista unitario (que como es notorio puede suprimirla cuando quiera), y carente de todo poder político real.

El 40 aniversario – celebrado ayer en el “congreso de los diputados” – de la superchería a la que llaman “Constitución” (es decir: la declaración formal y por escrito que de forma totalmente ilegal y demencial sanciona como “legítima y democrática” la CONSTITUCIÓN REAL de su Estado, que fue establecida históricamente a través de los siglos mediante agresión armada, crímenes imprescriptibles y ocupación militar contra los Pueblos y Estados sojuzgados), volvió a mostrar la unánime unidad de todos los partidos españoles en torno a su común empresa histórica de dominación nacionalista e imperialista sobre los Pueblos Vasco y Catalán, entre otros.

En ese acto, que fue también de pleitesía, se dedicaron a aplaudir largamente al monarca que el Dictador Franco decidió que, tras “el hecho sucesorio” (es decir: su propia muerte), debía “ser llamado en su día a sucederle [sic] a título de Rey o de Regente” etc. (Ley de Sucesión en la Jefatura del Estado, Artículo sexto; Junio-Julio 1947.) Un rey desnudo un tanto sorprendido y vagamente incómodo con las dudosas prendas que se le atribuían llevaba puestas, pero ovacionado con fervor por todos los presentes puestos de pie (menos unos pocos que no aplaudían con la pretensión de poder seguir engañando al pueblo con esa hipocresía, pero también “puestos de pie y con respeto”, como su mismo representante admitió) mientras ensalzaban el magnífico “vestido democrático” que todos ellos decían lo adornaba.

La hipocresía y falsedad de ese mencionado grupito de farsantes que – “puestos de pie con respeto” – no aplaudían, fue desenmascarada por el sociólogo D. Ramón Grosfoguel, entre otros en unos videos publicados en esta misma página el 5 de Noviembre de 2017, quien hace ver en ellos que el objetivo de ese grupo es engañar a los Pueblos y Estados sojuzgados para sacar votos en nuestros Países: cosa que apenas consiguen en España, con la desvergonzada falsedad de que si su jefe consigue ser presidente del Gobierno de España (y eso sí: una vez pagado su chalet de la sierra), “será bueno” con nosotros.

En la fervorosa unanimidad de esta farsa, llamaba la atención la ausencia de los partidos y representantes institucionales pretendidamente vascos y catalanes: “parlamentarios y presidentes autonómicos”. Su mala conciencia les impidió asistir al acto de reconocimiento de la “Constitución”, el Estado y el Jefe del Estado españoles, cuando sin embargo ellos están reconociéndolos cada día cuando acuden al Parlamento español, admiten su monopolio jurídico para legislar “legítima y democráticamente” sobre los Pueblos y Estados que España ha sojuzgado mediante las armas y crímenes imprescriptibles, participan en las “elecciones generales” totalitarias españolas afirmando que son democráticas (así como en sus mascaradas y “comisiones de investigación de la corrupción”, ¡el colmo!), y cobran de sus Presupuestos generales.

Indudablemente, la cara dura de quienes cobran, participan y reconocen, pero luego pretenden que no lo hacen, no evitará que sus respectivos Pueblos los vean y califiquen como lo que son: los colaboradores necesarios en el mantenimiento del régimen y el Estado españoles: imperialistas y fascistas de ocupación militar, admitidos por esos Traidores como los suyos propios, no-Nacionalistas, no-criminales, legítimos y democráticos.

En cuanto a los Nacional-socialistas, Nacional-comunistas y social-imperialistas de Falange-PsoE, PcE, sus franquicias locales y grupúsculos afines, que no les quepa duda de que los Pueblos Vasco y Catalán, recuperando las viejas consignas de su lucha contra el militarismo fascista, seguirán proclamando siempre su insumisión al totalitarismo imperialista español y su permanente afirmación de su derecho de autodeterminación o independencia inmediata, y de restauración y continuidad de sus propios Estados: El Reino de Nabarra y el Principado de Catalunya.

Simultáneamente, y mientras tanto, es preciso mantener un BOYCOTT TOTAL tanto al régimen de ocupación militar franco-hispano y a toda participación en sus “elecciones generales” e instituciones totalitarias, así como a todas las personalidades individuales o colectivas que, por rechazar en la teoría o en la práctica esa exigencia de evacuación, se constituyen objetivamente en agentes al servicio del régimen imperialista.

Según parece, da la impresión de que, durante una larga temporada histórica, van a tener que seguir aplaudiendo a la monarquía franquista y apoyando al Partido del Movimiento Nacional – o apoyándose en él – para una aplicación conjunta de su legislación fascista contra los Pueblos sojuzgados. En esas circunstancias no resultará sencillo seguir camuflándose como “demócratas” y “oposición socialista”: ¡será como para partirse de risa!

DERECHO DE AUTODETERMINACION O INDEPENDENCIA NACIONAL INCONDICIONAL E INMEDIATA DEL PUEBLO VASCO / EUSKAL HERRIA!

¡REINO DE NABARRA: EL ESTADO DEL PUEBLO VASCO / EUSKAL HERRIA!

¡Ejército de ocupación ni con música!

¡España ni con república! ¡Francia ni con monarquía!

¡BOYCOTT TOTAL A LOS IMPERIALISTAS Y FASCISTAS, Y A SU RÉGIMEN DE OCUPACIÓN MILITAR!

ALDE HEMENDIK!

¡¡¡VIVA EL PUEBLO VASCO LIBRE!!! – GORA EUSKAL HERRI ASKEA!!!